

Delegados de Protección de Datos
Esta figura actúa como garante del cumplimiento de la normativa de protección de datos en las organizaciones de tipo público y privado, aunque la responsabilidad final siga recayendo en el responsable de cumplimiento.
El Delegado de Protección de Datos (denominado comúnmente como DPD o DPO, por sus siglas en inglés -Data Protection Officer-), debe nombrarse atendiendo a sus cualidades profesionales y, en particular, debe contar con conocimientos especializados del Derecho y práctica en protección de datos. Actúa de forma independiente y entre las funciones que se le atribuyen están las de informar y asesorar al responsable o encargado del tratamiento además de supervisar que cumplen con el RGPD.
Adicionalmente, a efectos estratégicos para cualquier organización, esta figura actúa de modo obligatorio como el primer cortafuegos ante reclamaciones o denuncias ante la Agencia Española de Protección de Datos.
Nuestro equipo evaluará la necesidad de designar un DPD y, en caso de resultar necesario, informará al cliente al respecto para que pueda decidir si delega en nosotros dichas funciones.